# iso 14001 - Huella Hídrica & Huella de Agua - Huella de Carbono




ISO 14001 : Sistema de Gestión Medioambiental

Un Sistema de Gestión Medioambiental (SGMA) es aquella parte de Sistema de Gestión general de una Organización, que incluye la estructura organizativa, las actividades de planificación, las responsabilidades, las prácticas, los procesos, los procedimientos y los recursos necesarios para desarrollar, aplicar, alcanzar, revisar y mantener, los objetivos que la Organización haya establecido respecto a su conducta medioambiental.
La implantación de un Sistema de Gestión Ambiental bajo la norma internacional ISO 14001 otorga la posibilidad de sistematizar los aspectos ambientales que se generan en cada una de las actividades que las empresas desarrollan.
La norma ISO 14001 exige a la empresa crear un plan de manejo ambiental que incluya: objetivos y metas ambientales, políticas y procedimientos para lograr esas metas, responsabilidades definidas, actividades de capacitación del personal, documentación y un sistema para controlar cualquier cambio y avance realizado. La norma ISO 14001 describe el proceso que debe seguir la empresa y le exige respetar las leyes ambientales nacionales.
Implementar los requisitos y obtener la certificación 9001 – 14001 en una organización facilita el proceso de certificación posterior en Seguridad Alimentaria, y muchas organizaciones se deciden por este primer paso antes de enfrentarse a normas mas complejas y avanzadas.
Hacerlo de manera correcta y eficiente desde la perspectiva de un proceso de evolución hacia normas específicas de alimentación es algo que sólo pueden hacer empresas especializadas y con experiencia demostrable y favorable en Seguridad Alimentaria.
Water Footprint : El concepto de Huella Hídrica

La huella hídrica es un indicador ambiental que mide el volumen total de agua dulce utilizada para producir bienes y servicios consumidos por un individuo, una comunidad, un producto o una empresa.
Según el enfoque de la WFN, la huella hídrica se puede dividir en tres tipos de indicadores en función de su procedencia:
- Huella Hídrica verde: relacionada con el agua de lluvia incorporada en el producto o evapotranspirada por las plantas.
- Huella Hídrica azul: relacionada con el consumo de agua dulce.
- Huella Hídrica gris: relacionada con la calidad del agua y su contaminación debido a los contaminantes vertidos en un determinado proceso.
El concepto de huella hídrica surge de la necesidad de disponer de un indicador del uso del agua basado en el consumo real de agua de un proceso o un producto.
La huella hídrica muestra el impacto humano sobre los recursos globales de agua dulce y proporciona una base de conocimiento sobre la cual formular las estrategias a seguir de cara a minimizar los impactos negativos sobre el recurso.
ISO 14046: Huella del Agua
La huella de agua según la norma ISO 14046 establece los principios, requisitos y directrices para una correcta evaluación de la huella hídrica de productos, procesos y organizaciones, a partir del análisis de su ciclo de vida.
Como novedad con respecto a la metodología de Huella Hídrica de la WFN, la norma ISO no contabiliza únicamente el volumen de agua consumido, sino que evalúa los posibles impactos medioambientales relacionados con dicho consumo, a través de distintos indicadores relacionados con el agua.
Se centra el estudio en la calidad del agua y en el impacto ambiental sobre el entorno.
La evaluación de la Huella de Agua según la ISO 14046 será más útil para estudios exhaustivos de sostenibilidad ambiental de un producto o de una organización
Diferencias entre huella hídrica y huella de agua
Como principal diferencia entre la huella hídrica de WFN y la huella de agua de ISO 14046 podemos destacar que la metodología WFN ofrece una visión con un enfoque volumétrico mientras que la ISO 14046 ofrece un enfoque de impacto ambiental.
La huella hídrica según la metodología de WFN está ampliamente establecida y, debido a su mayor recorrido, está más difundida entre organizaciones y público general.
Esto se debe también a que sus resultados son fácilmente interpretables. El enfoque volumétrico (litros totales de agua consumida o contaminada para producir un producto, por ejemplo: 150 litros de agua para producir una taza de café) ha servido para concienciar sobre el uso de agua real que hay detrás de un producto, y permite además una fácil difusión, ya que no se requiere conocimientos técnicos para interpretar su mensaje.
En la huella de agua según el enfoque ISO 14046 se evalúan impactos sobre el medio ambiente, la salud humana, y sobre los recursos naturales relacionados con el agua consumida o degradada por un producto, proceso u organización. Se trata, en definitiva, de un análisis más exhaustivo y que complementa el enfoque de la WFN. Sin embargo, dicho análisis es más complejo y sus resultados son más difíciles de interpretar para el público no familiarizado con la metodología de análisis de ciclo de vida.
El análisis de la Huella Hídrica según WFN puede servir como una herramienta de concienciación o como una herramienta de evaluación y gestión regional del agua. Por otra parte, la evaluación de la huella de agua según la ISO 14046 será más útil para estudios exhaustivos de sostenibilidad ambiental de un producto o de una organización.
ISO 14064: El concepto de Huella de Carbono
Atendiendo a la definición del Ministerio para la transición Ecológica, se entiende como huella de carbono “la totalidad de gases de efecto invernadero — GEI — emitidos por efecto directo o indirecto por un individuo, organización, evento o producto.”
- Huella de carbono de una organización. Mide la totalidad de GEI emitidos por efecto directo o indirecto provenientes del desarrollo de la actividad de dicha organización.
- Huella de carbono de producto. Mide los GEI emitidos durante todo el ciclo de vida de un producto: desde la extracción de las materias primas, pasando por el procesado y fabricación y distribución, hasta la etapa de uso y final de la vida útil (depósito, reutilización o reciclado).
El análisis de huella de carbono proporciona como resultado un dato que puede ser utilizado como indicador ambiental global de la actividad que desarrolla la organización.
La huella de carbono se configura así como punto de referencia básico para el inicio de actuaciones de reducción de consumo de energía y para la utilización de recursos y materiales con mejor comportamiento medioambiental.
Clasificación de emisiones de GEI
Emisiones directas de GEI: son emisiones de fuentes que son propiedad de o están controladas por la organización. De una manera muy simplificada, podrían entenderse como las emisiones liberadas in situ en el lugar donde se produce la actividad, por ejemplo, las emisiones debidas al sistema de calefacción si éste se basa en la quema de combustibles fósiles.
Emisiones indirectas de GEI: son emisiones consecuencia de las actividades de la organización, pero que ocurren en fuentes que son propiedad de o están controladas por otra organización. Un ejemplo de emisión indirecta es la emisión procedente de la electricidad consumida por una organización, cuyas emisiones han sido producidas en el lugar en el que se generó dicha electricidad.
Alcance la de la huella de carbono
Alcance 1: emisiones directas de GEI. Por ejemplo, emisiones provenientes de la combustión en calderas, hornos, vehículos, etc., que son propiedad de o están controladas por la entidad en cuestión. También incluye las emisiones fugitivas (p.ej. fugas de aire acondicionado, fugas de CH4 de conductos, etc.).
Alcance 2: emisiones indirectas de GEI asociadas a la generación de electricidad adquirida y consumida por la organización.
Alcance 3: otras emisiones indirectas. Algunos ejemplos de actividades de alcance 3 son la extracción y producción de materiales que adquiere la organización, los viajes de trabajo a través de medios externos, el transporte de materias primas, de combustibles y de productos (por ejemplo, actividades logísticas) realizados por terceros o la utilización de productos o servicios ofrecidos por otros.